El cine es el arte más autorreferencial de todas. Históricamente los realizadores utilizan referencias visuales de películas anteriores o directamente copian o ¨se inspiran¨ en encuadres, movimientos de cámara, iluminaciones y demás artificios. Para conseguir esto es necesario ver y rever cine, lo que convierte algunas películas en obras de arte también en objetos de estudio y culto.
Uno de los más notorios ejercicios de cinematografía es el plano-secuencia, es decir, un plano entero sin cortes de cámara (o sin cortes aparentes), que incluye diferentes valores de imágen para narrar una única secuencia. Son excepcionales los planos-secuencia de La Soga, de Hitchcock, Toque de Mal, de Orson Welles o El Jugador, de Robert Altman.
La premiada película El Secreto de sus Ojos, dirigida por Juan José Campanella, tiene un magistral plano-secuencia, que combina una toma de helicóptero, diálogos, persecusión, planos de interiores y con muchos extras. Para verlo en youtube clique en Plano secuencia de El Secreto de sus Ojos.
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